Desde el hogar damos el sí por Cuba

Bárbara Fortes

La familia saguera se mantiene unida en tiempos de COVID-19.
Este no ha sido un 1ero de mayo de madrugadas, para estar a tiempo en el lugar de concentración, ni el de las grandes marchas del proletariado, un Primero de mayo diferente, estaremos en las casas, pero celebrando con el mismo ímpetu y espíritu.

El matrimonio conformado por Carmen Alvarez Betancourt y Feliberto García Abreu, desde el balcón de su apartamento en los edificios de la calle General Lee, en el centro de la ciudad, enarbolan la bandera de Cuba con la alegría de festejar el Día internacional de la clase obrera.

Jubilado de los Ferrocarriles de Sagua la Grande, Filibertoa pesar de sus 76 años, añora la participación en la marcha:"Siempre madrugaba para ser de los primeros en llegar al punto de concentración y marchar por los logros de la clase obrera,en estos momentos, una vez más, Cuba es un ejemplo en la protección a los adultos mayores,el beneficio de mantenerse en las casas y recibir el salario al 100% el primer mes y después al 60%, indudable, con ogullo digo que me siento muy feliz de ser cubano".

Carmen también asistía alos desfiles, jubilada de la Asamblea municipal del Poder Popular en Cifuentes,ahora en su hogar, está contenta, porque cumple con la orientación de quedarse en casa, para protegerse y evitar cuaqluier compicación y la importancia de cuidar la salud.

Las batas blancas con el color que simboliza la paz, se ven en labores de pesquisas a la población, una labor altruista, extienden sus manos para contribuir a enfrentar esta enfermedad muy peligrosa y así salvar vidas.

La mejor felicitación, tiene que ser un día de aislamiento domiciliario, con alegría y optimismo de que Unidos Venceremos a la COVID-19.