Un torrente de vida
Por: Bárbara Fortes Moya
La sangre humana no puede obtenerse artificialmente o sintetizarse, debe proceder de otra persona, capaz de producirla en su propio organismo. Por tal razón, las donaciones revisten gran importancia para salvar vidas.
Cada 14 de junio es declarado Día del Donante voluntario de sangre.
En el Centro de Extracción de sangre y servicio de transfusión de Sagua la Grande, ubicado en la calle Luis Mesa, esquina a Agramonte, labora de lunes a sábado, un equipo de especialistas, técnicos en Inmunohematología, encabezado por el doctor Iván Arencibia.
Según datos suministrados por el referido Centro, de enero a la fecha se registran sólo 866 donaciones de sangre. El Hospital de Sagua suministra a los pacientes que lo requieren un elevado número de transfusiones de sangre, de forma gratuita, lo que indica la necesidad de aumentarlas cada día, para salvar vidas.
El galeno explica que reciben a la población sana, proveniente de los consultorios médicos, para realizarles la extracción y les practican un examen físico para descartar enfermedades, medirles los signos vitales, la presión arterial, el pulso y la temperatura.
Una donación sanguínea puede ser invalidada en caso de mujeres en estado de gestación, y en período de menstruación, cirugías pequeñas dentarias, episodio febril o diarreico o una enfermedad viral, vitíligo, individuos seropositivos, con Hepatitis B y C o que hayan padecido de paludismo. o con tatuajes recientes. La sinceridad del donante, resulta vital, debe ser una persona sana, para no afectar la salud de los pacientes, precisó.
Todos los grupos sanguíneos son necesarios, los incluidos en los A, B, O y AB, estos pueden ser positivos o negativos. Los más demandados son A positivo y O positivo.
La sangre se traslada desde el Centro de Extracción municipal hacia el Banco provincial y es procesada para pesquisar un grupo de enfermedades que se transmiten por el torrente sanguíneo.
Por varios métodos se realiza la separación de los diferentes componenentes de la sangre y almacenados para quienes necesitan una transfusión sanguínea.
Uno de los recursos imprescindibles en el centro de extracción son las bolsas recolectoras de sangre, desechables. Están provistas de una tarjeta donde se registran los datos personales de la persona. La capacidad de las mismas es de 450 mililitros. Estas son almacenanadas en equipos de refrigeración especializados a una temperatura de 3 a 4 grados centígrados.
Entre los casos que requieren más componentes sanguíneos están los relacionados con pacientes de Cirugía, Oncología, Nefrología, así como los afectados por fenómenos atmosféricos o accidentes de tránsito, precisa el especialista.
Cuba sobresale entre los países del mundo que posee un programa de donaciones de sangre, al ser este un gesto de genuina solidaridad.
Los donantes voluntarios de sangre facilitan el aumento de los componentes sanguíneos disponibles y por ende, al extender su brazo en gesto altruista evitar que no fallezcan seres humanos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) precisa que medio millón en mujeres en el mundo fallecen cada año durante el embarazo o el parto, y 130 mil a consecuencias de hemorragias que no pueden ser controladas por la falta de sangre.
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