Mujeres en la conquista del cosmos

La taikonauta Liu Yang

 

Desde hace varias semanas medios de prensa en internet resaltan el lanzamiento por parte de China de la nave espacial Shenzhou IX, que finalmente se produjo con éxito este sábado, según fuentes oficiales.

Uno de los aspectos más explotados por los medios es la noticia de que entre los taikonautas, como denomina el país asiático a sus astronautas, viaja Liu Yang, la primera mujer china en ir al espacio.

Yang, de 33 años, resultó seleccionada luego de un largo y riguroso proceso en el que otra de sus colegas, Wang Yaping,  aparecía en la lista de las favoritas. Yang es una veterana piloto con casi 1 700 horas de vuelo y es originaria de la provincia de Henan.

En el 2010 recibió honores como piloto modelo. Los medios chinos la describieron como una "piloto heroica" que logró realizar con éxito un aterrizaje de emergencia después de que un pájaro se estrellase contra el parabrisas de su avión.

De esta forma, Yang se une a lista de mujeres que han conquistado el cosmos desde que en 1963 lo hiciera la rusa Valentina Vladímirovna Tereshkova, quien con 26 años se convirtió en la primera mujer cosmonauta de la historia.

El viaje de Tereshkova duró exactamente 70 horas y 50 minutos, tiempo suficiente para dar 48 vueltas alrededor de la Tierra lo que significa que vio un nuevo amanecer cada hora y media.

A solo dos años de que los rusos lograran el histórico vuelo de Yuri Gagarin el 12 de abril de 1961, Tereshkova viajó en el “Vostok 6” y probó al mundo que las mujeres tenían la misma resistencia física y psicológica que los hombres en un ambiente espacial; uno de los objetivos que perseguía el viaje, meticulosamente preparado en secreto por parte de las autoridades rusas.

Incluso se afirma, que su propia madre no sabía el objetivo del proyecto en el que estaba inmersa su hija hasta días antes del lanzamiento. Para ella acudía cada día a un campo de entrenamiento para paracaidistas elites.

Se dice que Tereshkova es una ferviente aficionada a la historia, las matemáticas y la música; además se le conoce como una incansable luchadora del movimiento feminista ruso y a favor de la paz mundial. A lo largo de su vida recibió innumerables medallas y condecoraciones, entre ellas la Medalla de Oro de la Paz, otorgada por las Naciones Unidas.

Veinte años después de su vuelo, otra colega, Svetlana Savitskaja, volvería al espacio y colocaría el papel de la mujer en lo más alto.

Hija de un mariscal del aire, dos veces Héroe de la antigua Unión Soviética por los méritos acumulados durante la segunda guerra mundial, Savitskaja jugaba con aviones desde niña. Se dice que a los 17 años había conquistado tres records mundiales en paracaidismo, de la que era una aficionada desde muy jovencita.

Tras el éxito alcanzado por las mujeres rusas, Estados Unidos decide enviar a Sally Kristen Ride el 18 de junio de 1983, convirtiéndose de esta forma en la primera norteamericana en viajar al espacio.

Los historiadores resaltan el carácter y tenacidad de esta joven californiana que había obtenido un un título en la Universidad de Stanford en Física y otro en Literatura inglesa. La misma Sally contó en varias entrevistas que siempre había soñado con ser astronauta. Por eso, no lo pensó dos veces cuando leyó la convocatoria de la NASA.

“Abandoné todo y corrí a presentarme. Todos me decían que estaba loca y me preguntaban cuáles podían ser mis posibilidades. Sin embargo, yo estaba firmemente decidida a lograr mis propósitos", relató en ese momento Sally.

La norteamericana fue seleccionada entre 1 544 mujeres que se presentaron. En 1978 la NASA la incluyó entre su nómina de astronautas y después de un año de formación consiguió su objetivo de formar parte de la tripulación que viajó en 1983 en el CHALLENGER (STS-7), encargándose de realizar diversos trabajos y experimientos.

En 1984 volvió a participar en otra misión y a partir de 1989 empezó a trabajar impartiendo clases de Física en la Universidad de California. En 2006 fue incorporada al salón de la fama de Estados Unidos.

Tereshkova,  Savitskaja y Ride son ejemplos de mujeres tenaces e inteligentes que lograron abrir el camino a otras que hoy continúan en la conquista del cosmos; a la vez que marcan pautas en la historia universal.