Blogia
A mi Entender

Con especial cariño

Con especial cariño

 

 Bárabara Fortes

Una dosis extra de amor y consagración  para los  niños y niñas  con necesidades educativas  especiales entregan  a diario los maestros de la escuela especial Filiberto Rivero de Sagua la Grande. La licenciada en Defectología, Olivia Abrahantes, es la directora del centro hace 6 años y califica  de maravillosa  la experiencia que vive a diario. 

 En  la institución  educacional con régimen interno, sita en la calle Colón, entre Martí y Padre Varela, en esta ciudad, están matriculados 106 escolares con diagnóstico de  retraso mental de la ciudad de  Sagua, sino de los poblados de La Rosita, Viana, Caguagua, Jumagua, Sitiecito, Viana, e Isabela de Sagua. 

Los programas educacionales  que reciben son diseñados para este tipo de estudiantes sen las asignaturas de Matemática, Español, Historia, Ciencias Naturales, Cívica y Comunicación Social, Educación Física, Computación,  Educación Laboral y Educación Musical, que imparte  la instructora Marisol Pérez Mesa, con dos años de labor.

Al  preguntarle  acerca de  su trabajo, dice sentirse muy feliz de  poder  enseñar a sus alumnos Apreciación Musical y haber creado una banda rítima  y  rondas infantiles que resultan del agrado de  ellos. 

El quehacer educativo se extiende hasta los hogares de 8 niños que no pueden asistir  por agravantes de su salud a la escuela y los maestros ambulatorios son los encargados de enseñarles las diferentes materias. 

Otra de las especialidades que ayudan al desarrollo psicológico de estos menores  son la Logopedia y la Psicopedagogía, esenciales para menores  con estas  características. 

Como aspecto muy singular , los alumnos se mantienen en la escuela  hasta arribar a la edad laboral (18 años) .Otros concluyen el 9no.grado y previa preparación transitan a la Escuela de Oficios, donde  concluyen su instrucción general y egresan sin abandonar los estudios con 2 años como mínimo. 

El colectivo, no ahorra horas de trabajo, al decir de su directora, quien refiere  que  logran  mantener la limpieza de  todas las áreas de la escuela, incluidas baños, comedor, los  albergues, uno de hembra y otro de varones. 

La atención es muy esmerada para con estos escolares quienes reciben además de la base material de estudio,  módulo de aseo personal, servicio de lavandería, barbería y peluquería, así como los  servicios de salud  las 24 horas del día,  que están a cargo de  la  doctora Raiza Subero y las enfermeras Yackeline Hernández y Blanca Ascunce.

Sentirse útiles  constituye un elemento muy importante en su formación integral. Los estudiantes que  cursan 6to, 7mo, 8vo y 9no grados, laboran en un área del Jardín Municipal  en la siembra de hortalizas para su propia alimentación, la  que se elabora en el comedor de la escuela.También confeccionan  diferentes artículos como agarraderas, manteles y reparan sus uniformes escolares. 

La recreación es otro aspecto que no escapa de la atención del claustro Poseen equipos de música, videos, y televisores. Los instructores de arte en todas las manifestaciones se encargan de  la realización de actividades  culturales que ayudan al equilibrio emocional de los alumnos. 

 Muy satisfecha, dice sentirse Lourdes Toyos, presidenta del consejo de escuela, quien tiene  allí a su hijo desde pre escolar  y actualmente cursa 9no grado. Esta mamá dice estar muy  contenta  y expresa “Le agradezco mucho  a excelente centro educacional Los maestros son muy responsables y  sienten un  inmenso amor por su profesión”. 

Las escuelas especiales surgieron en nuestro país hace 50 años y  son parte de la obra educacional revolucionaria que demuestra que  las niñas y los niños tienen el derecho de aprender porque ellos son como dijera nuestro José Martí  “la esperanza del mundo”. 

 

 

0 comentarios