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Temperaturas máximas cercanas a lo normal y mínimas por encima de lo habitual es el pronóstico climático para el mes marzo en Cuba, dijo Idelmis González García, especialista del Instituto de Meteorología (INSMET).

En conferencia de prensa en La Habana, González García apuntó que para el próximo mes puede que el clima se haga más tormentoso, lo cual indica la posibilidad de ocurrencia de brotes de tiempo severo asociados al avance de líneas de tormentas locales fuertes vinculadas al paso de los sistemas frontales.

Agregó que no debe descartarse que ocurra inundación costera en el litoral norte de la mitad occidental del país relacionada con la presencia de sistemas frontales en el Golfo de México, según dio a conocer la emisora Radio Reloj.

La Máster en Ciencias sostuvo además que el actual evento El Niño-Oscilación del Sur, ENOS, continúa su evolución como un evento fuerte, después de alcanzar su máxima intensidad e iniciar una gradual y lenta declinación.

El estado meteorológico al cierre del mes de enero y durante todo lo que va de febrero indica que ha llovido bastante, como resultado de los efectos del fenómeno de El Niño-Oscilación del Sur (ENOS).

El acumulado en embalses de abasto a la población se vio favorecido a ni­vel nacional, incluido el oriental. Hasta el momento,  se cuenta con un 52 % de la ca­pacidad total. La región que menos acumuló fue el centro con un 13 % de la media histórica.

No obstante, hay un total de 229 fuentes de abasto afectadas, lo que significa una población de 957 831 habitantes que dependen de dicho abasto.

Santiago de Cuba se mantiene como la provincia de situación más difícil, con 59 fuentes cuyos vertimientos no son regulares, y una población de 690 928 habitantes, a los cuales se les asiste a través de medidas emergentes para evitar una crisis.

El actual estado hidrológico de estas fuentes se debe a los efectos de períodos de sequía precedentes y al corrimiento de la etapa de lluvias como resultado del fenómeno ENOS.

Por eso es necesario que la población en­tienda que una etapa lluviosa no implica necesariamente salir de una situación de sequía en el abasto, se necesita de varios fenómenos lluviosos de gran magnitud para sortear la situación que presentan nuestros em­balses y cuencas hidrográficas, precisó el Máster y especialista del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, Argelio Richelmesta.

(Con información de Radio cubana)